CONDICIONAMIENTO OPERANTE
Desarrollado por B.F Skinner, el condicionamiento operante es una forma de aprender por medio de recompensas y castigos. Este tipo de condicionamiento sostiene que una determinada conducta y una consecuencia, ya sea un premio o castigo, tienen una conexión que nos lleva al aprendizaje.
A. Refuerzo
El refuerzo es un proceso de incrementación de la frecuencia o tasa de ocurrencia de una determinada conducta, por medio de un estímulo presentado poco después de su manifestación. Al evento que intensifica la probabilidad de que el comportamiento se repita se le denomina reforzador. Existen dos tipos de refuerzo
Reforzadores positivos son estímulos favorables que se dan después de la presentación de la conducta. El refuerzo positivo fortifica la probabilidad de un comportamiento por medio de la adición de algo.
Reforzadores negativos, por otra parte, son la eliminación de los estímulos desfavorables después de la presentación de un comportamiento. En el refuerzo negativo, el comportamiento o respuesta se intensifica por la eliminación de algo.
B. Castigo
En contraste con el refuerzo, el castigo es un proceso en el que un estímulo es dado después de la presentación de un comportamiento causando la disminución de la probabilidad de que éste ocurra nuevamente. Hay dos tipos de castigos:
Castigo positivo es la adición de algo que causa la disminución de la repetición de determinada conducta. El castigo negativo, también conocido como castigo por eliminación, se produce cuando un evento o resultado favorable se retira después de que un comportamiento se produce.
Castigo negativo, por otro lado, es la eliminación de algo que es favorable, con el fin de disminuir la probabilidad de que vuelva a ocurrir ese comportamiento.